En el mundo de la lucha de entretenimiento ‘La Roca’ siempre ha sido Dwayne Johnson: luchador, actor y comediante. Pero por muy popular que sea Dwayne ‘The Rock’ Johnson el verdadero merecedor de ese apodo no es él. Lo siento Dwayne. Por muy protagonista del Rey Escorpión que fueras, para mí ‘La Roca’ siempre será Brock Lesnar. O mejor Brock ‘The Rock’ Lesnar.
Y no lo digo sólo por el detalle de la sonoridad de nombre con apodo que casa como anillo al dedo, lo digo por dos razones:
1. La fisionomía de Lesnar
2. Las ‘pelotas’ de Lesnar.
Brock Lesnar era un luchador de entretenimiento a sueldo de la WWE en los primeros años de 2000. Solía ejercer el papel de malo en ese teatro. Bien instruido en como entretener al público, cuando su contrato con la WWE expiró hizo una intentona en el fútbol americano. Sin demasiado éxito, viró hacia las MMA. Con tan solo una pelea, el ojo del UFC se fijó en él. Gran acierto.
He visto todas las peleas de Lesnar en el UFC. Para el Ultimate Fighting Championship peleó siete veces. Debutó contra Frank Mir y perdió con una llave de pierna. En su segundo combate, destrozó a Heath Herring. En su tercera pelea, le arrebató el cinturón de los pesos pesados a Randy Couture, nada más y nada menos. En la cuarta, se vengó de Frank Mir. Ganó por TKO. En la quinta, para mí la mejor, aguantó la tormenta de golpes a que fue sometido por Shane Carwin en el primer round para someterlo con un triángulo de brazo en el segundo. Perdió el cinturón del peso pesado ante Caín Velásquez. Y, por último, dijo ‘hasta luego Lucas’ después de perder contra Alistair Overeem cuyos rodillazos le hicieron más daño que una mujer diciéndole a un hombre ‘¿ya está?’ en la cama.
Renueva por la WWE. Normal. Le pagarán más y le pegarán menos.
Lesnar en la WWE
Decía gran acierto el fichar a Lesnar porque sus peleas generaron una expectación máxima siempre. Brock tenía y sigue teniendo un carisma de esos que tanto interesa en este negocio. Carisma es igual a venta de entradas o venta de pay-per-view y ahí uno de los mejores es él. Por eso, el UFC ha intentado repescarlo ahora que su contrato con la WWE finalizaba. Después de varios meses, el propio Lesnar ha deshojado la margarita. Renueva por la World Wrestling Entertainment. Normal. Yo también lo haría. Le pagarán más y le pegarán menos.
Todo lo que tenía que demostrar ya lo hizo. Acalló a los puristas de las MMA que dudaban e incluso se reían de él antes de entrar al Octágono. Con su fisionomía peculiar de poco cuello, mucho trapecio, espalda amplia y espada tatuada en el pecho, Brock Lesnar dio el paso de luchar teatralmente a hacerlo con fuego real. Demostró que tenía agallas para meterse en una jaula de lucha y se hizo con el cinturón de los pesados.
¿Sabéis qué respondía en plan gracioso Dwayne ‘La Roca de cartón piedra’ Johnson cuando le preguntaban por si había pensado en pasarse a las MMA? «No me gusta que me peguen en la cara». Sólo ha habido una roca, lo tengo claro, Brock ‘The Rock’ Lesnar.
Por Enrique Gimeno
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